Se trata de que hagas oración cada día. Todos los días puedes empezar el rato de oración con la "oración inicial para cada día"; después, leyendo con atención el "texto de cada día", charlas con Dios y con María; por último, terminar rezando la "oración final".
Dos ideas previas:
1. PROHIBIDO CORRER: Es corto; no tengas prisa en acabar. No es leer y ya está.
2. LO QUE NO ESTÁ ESCRITO: ¿Sabes qué es lo mejor de este texto? Lo que no está escrito y tú le digas; la conversación que tú, personalmente, tengas con Él.
Dos ideas previas:
1. PROHIBIDO CORRER: Es corto; no tengas prisa en acabar. No es leer y ya está.
2. LO QUE NO ESTÁ ESCRITO: ¿Sabes qué es lo mejor de este texto? Lo que no está escrito y tú le digas; la conversación que tú, personalmente, tengas con Él.

Comentarios
Publicar un comentario